Un clima cálido y húmedo envuelve al alumnado que entra en el invernadero del jardín botánico. Las gafas se empañan, el aire huele a tierra mojada, grandes hojas se agitan en las ramas, mientras los alumnos, dejándose llevar por sus oídos, llegan a un pequeño arroyo junto a un árbol de cacao. Estas breves impresiones muestran la autenticidad del jardín botánico como entorno de aprendizaje. En su interior, los estudiantes se encuentran con las condiciones climáticas propias de los boques tropicales y con una selecta variedad de las plantas que lo habitan. No aprenden de forma teórica los factores ambientales que ocurren en los trópicos, sino que los sienten ellos mismos y los miden.
Durante el proyecto, efectúan pequeños experimentos a fin de aprender acerca del ecosistema del bosque tropical, la adaptación de las plantas y la interferencia antropogénica. El ciclo de aprendizaje consta de cinco unidades de aprendizaje obligatorias y una facultativa. Tal como sugerimos antes, exploran las condiciones ambientales del ecosistema. Miden las condiciones climáticas por su cuenta y aprenden a distinguir los factores bióticos de los abióticos. Analizan la importancia de los diversos factores para la vida de las plantas tropicales. Mientras aprenden acerca de las diferentes capas que forman el bosque tropical, se percatan que están ocurriendo varios factores en varios niveles que conducen a distintas morfologías de plantas. A la inversa, los estudiantes examinan las plantas para discernir las condiciones ambientales en que crecen.
En este marco, se encuentran con las interacciones entre animales y plantas y aprenden a distinguir las diferentes formas que adoptan los factores bióticos. Además aprenden a formular hipótesis y a verificarlas. En lo que respecta a la educación para el desarrollo sostenible, se les confronta con productos de la vida diaria. Aprenden a reconocer los productos que tienen un origen tropical y los trucos de etiquetado que a veces usa la industria para ocultarlo, así como la creciente desigualdad social entre campesinos y empresarios. Los estudiantes aprenden acerca de las etiquetas sociales para abrirse camino en medio de la jungla de las mismas. Por otra parte, trabajan las conexiones entre los bosques tropicales, los sumideros de carbono, la deforestación y el cambio climático. Al mismo tiempo que comprenden la importancia de los bosques tropicales para el clima en Europa, los estudiantes encuentran otros argumentos sobre la necesidad de preservar esos bosques. Durante la unidad de aprendizaje electrónico, utilizan los datos originales de Ecuador derivados de un proyecto de DFG para aprender más sobre las condiciones climáticas reales en los bosques tropicales. Comparan su clima con el de la ciudad alemana de Bayreuth y encuentran las diferencias durante el día y entre las estaciones. También analizan su contribución al cambio climático y proponen estrategias para un desarrollo climático sostenible.